Hay muchas razones por las que con el tiempo una paciente previamente operada de aumento de pecho puede requerir una nueva intervención, lo que se conoce como cirugía secundaria. Estos casos suelen ser más complejos que un caso primario, y por tanto, es aún más importante que sean llevados a cabo por cirujanos plásticos cualificados.
Contractura capsular: Siempre que introducimos una prótesis en el organismo, éste forma una cápsula alrededor que la aísla. Este proceso de cicatrización es normal y fisiológico. Algunas personas, por causas no del todo conocidas, tienden reaccionar en exceso a esa prótesis formando un exceso de cápsula, lo que se conoce como contractura capsular. Hay varios grados de severidad. En los casos más leves simplemente se nota una mayor dureza en una mama que otra, lo cual no reviste demasiada importancia y no requiere tratamiento. En otros casos más avanzados la cápsula puede llegar a deformar la prótesis o incluso producir dolor. En estos raros casos, el tratamiento indicado puede ir desde la toma de medicamentos específicos a la retirada de la prótesis y de la cápsula, siendo recambiada por otra prótesis.
Cambio de volumen: Con el tiempo puede desear cambiar el volumen de sus prótesis, ya sea con la intención de aumentar o disminuir talla. Cualquier opción es posible y requerirán una nueva intervención en la que habrá que ampliar o reducir el bolsillo, y en ocasiones, ajustar el exceso de piel.
Vejez de las prótesis: Con el tiempo puede que sus prótesis requieran ser recambiadas, ya sea porque se han roto y esa rotura es diagnosticada en una mamografía o por deseo suyo.
Necesidad de mastopexia: Con la edad el pecho evoluciona, pierde elasticidad y tiende a caer. Las prótesis tienen mayor tendencia a mantener su posición con el tiempo pero la glándula puede caer algo, ocupando una posición inferior en el torax. Esto puede requerir una mastopexia (elevación mamaria) para elevar y rejuvenecer su pecho.